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22 abr 2012

No basta con sentir tristeza, hay que indignarse, emputarse, sacar esto del facebook,de los muros de la u... y luchar...

Hace unos días teniendo una discusión sobre el tema, recordamos que Internet como herramienta para la comunicación se ha vuelto indispensable para miles de personas a nivel mundial, hasta tal punto en que ésta herramienta llegue a preocuparnos sobre su papel y el riesgo que llegue a opacar a la persona tras el teclado, (no al individuo sino al humano), desde hace un par de décadas los procesos informativos y comunicacionales han pretendido abrirse paso por medios virtuales, optimizando y avanzando en términos de complacer las exigencias del mercado, la publicidad, las ventas, la información y la avalancha de "basura" que día a día aparece en Internet, toda una gama de entretenimiento* para todos los gustos; religiosos, econónomicos, sociales, farándula, deportivos, cómicos, etc. Pero que en su mayoría cumplen su función, la de entretener en otros asuntos, que son de mayor importancia, o mejor, entretienen mientras algo realmente grande se esté cocinando,  ejemplo muy claros, la ley 201 de 2012, también llamada: "Ley Lleras 2" fue aprobada mientras cientos de Colombianxs estaban haciendo barra a sus equipos, en diferentes partidos del fútbol Colombiano (fútbol todo de Ardila Lule). En Internet muchas páginas y personas no aguantaban la risa con el "Ublime"de Shakira mientras lxs Cartagenerxs eran reprimidos y silenciados en la ciudad, mientras se seguían esfumando nuestras riquezas en la venida de Obama, el padre Yankee, mientras el Tratado de Libre Comercio, o mejor "Tratado de Lacras Capitalistas"  entra en vigencia. Al parecer el robo indiscriminado de nuestros recursos, de nuestra vida, no es tan importante como las cagadas de la "Colombiana" Shakira. Un punto importante al que hacen referencia quienes defienden Internet como un  medio "revolucionario", "bastante importante" y "beligerante", fue el papel que jugó en las revueltas y transformaciones en Oriente Medio,cosa que no alcanza a defenderse por si misma, si lo vemos desde que: en Egipto, el servicio de Internet fue censurado recién empezaban las movilizaciones y en otros espacios Internet no alcanzaba a suplir las necesidades comunicativas que exigían los cambios sociales. Equivocadxs estamos si creemos que Internet y los medios virtuales son el arma revolucionaria mas importante de los últimos tiempos, NO SEÑORES, esto sería prácticamente como validar las TICS como medio primordial en la educación, discurso totalmente neoliberal y defensor de las exigencias capitalistas. Es importante recalcar que Internet, además es responsable del uso indiscriminado de energía eléctrica, que además ni es nuestra porque como terminaron de vender la EBSA, peor, es responsable además de grandes emisiones de CO2, de la perdida y afectación negativa en las relaciones sentimentales y personales.
Aunque cabe destacar que en muchos casos puede ser utilizado para "bien", envío de mensajes , fotos, información, hasta para comunicarse, sabiendo diferenciar entre información y comunicación, hay que tener cuidado y no entregarse a la boca del lobo.Bien sabemos muchas personas que las redes sociales se han vuelto uno de los principales medios de espionaje y vigilancia de las potencias mundiales para seguir manteniendo SU orden, SU justicia, SU paz, con nuestros likes y retweets.
Mientras tanto, nosotrxs estaremos en este espacio, criticando y transformando desde adentro, sin creer que se hace mas por internet que en las relaciones humanas físicas en la sociedad.



"Sonamos muchachxs, Resulta que si uno no se apura a cambiar el mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno!"

9 abr 2012

[Con respecto a lo ocurrido en la UPTC, se pone en el ambiente la discusion sobre el papel de la violencia, inivitamos a la gente a leer y si esta de acuerdo, difundir esta nota, que hace parte de lahaine.org]

"esta imagen representa lo que la policia le hace a nuestra juventud, que quiere y anhela una sociedad distinta"

El entorno educativo se ha llenado de todo un discurso y una pedagogía dirigida a inculcar la conducta no violenta en los alumnos. Una pedagogía que aboga por una resolución pacífica y dialogada de los conflictos. Esto suena de maravilla y de hecho es muy positivo en muchos casos, sin embargo el descartar la violencia y verla como un camino siempre desacertado tiene un trasfondo mucho más complejo que va más allá de las simples relaciones personales y que merece la pena analizar. Es curioso ver como toda manifestación de violencia por parte de algún colectivo de personas, trabajadores, estudiantes, etc., es siempre condenada sin dilación por muy injusto que sea el motivo de esa rabia que la produce: despidos, explotación, recortes presupuestarios y demás elementos que provocan su consecuente disminución de la calidad de vida por no hablar en muchos casos de desastre económico o ruina. Este hecho es como digo, curioso y susceptible de reflexión de por sí, pero aún lo es más cuando lo comparamos con las manifestaciones violentas que se producen desde el estado y sus instituciones.

Cuando hablamos de intervenciones policiales, represión de manifestaciones, intervenciones militares, etc., el hecho se carga inconscientemente de una increíble legitimidad, que crea una condena mucho más débil, por no decir inexistente, y que hace referencia a una actitud respecto a unas fuentes de violencia diferentes y no a hechos concretos justificados o no. Por lo tanto el continuo bombardeo desde las escuelas para inculcar el rechazo a la violencia se hace con un doble sentido, porque ese rechazo no es igual para cada caso y depende de quien la ejerza. Recordemos que los educadores en muchas ocasiones justificamos la acción violenta por parte de las fuerzas represivas del estado para acabar con los “ladrones malos” o la gente que no sigue la ley y mandamos el mensaje de la necesidad de que exista un cuerpo con legitimidad para ejercer la violencia y guardar el orden, sin ni siquiera hacer cuestionar los cimientos de ese orden y sus injusticias. Este tipo de educación, no crítica y fomentadora de reflexiones y discrepancias va poniendo esas bases para que en un futuro también legitimen ese tipo de acciones de los estados y que con el peso de la misma sociedad, medios de comunicación, etc. reproducirán esa manera de pensar.

Deberíamos de recordar para intentar completar esta reflexión, que el mensaje: “la violencia nunca llega a ninguna parte”, tan oído hasta la saciedad, es uno de los mayores aliados del nuevo orden económico mundial, el cual a su vez cuenta con ese tipo de violencia legitimada a la que no duda recurrir en caso de encontrarse con obstáculos, -baste recordar las dictaduras de los 70´s guiadas por los EEUU para instaurar su modelo económico-. El por qué pues, de que esa afirmación o rechazo de la población de la violencia sea un gran aliado de este nuevo orden económico, lo encontramos en el hecho de que esa violencia, por mucho que nos piten los oídos al escucharlo, ha sido siempre uno de los mayores motores de la historia en cuanto a herramienta de los desfavorecidos para reclamar presionando a los poderosos y explotadores. Herramienta que ha provocado revoluciones en todo el mundo y a lo largo de toda la historia y que hoy por hoy es una de las pocas, por no decir casi la única, que es capaz de poner en jaque a estados enteros: Bolivia, Colombia, Corea del sur, Palestina, Chechenia, etc. Con lo cual habrá que cuestionarse el porqué de esa obsesión por parte de los poderosos de inculcar la no-violencia y nuestro papel cómplice de estos a la hora de educar, aprobar o condenar.

Para terminar he de dejar claro que mi intención es la de conseguir una visión sobre la violencia que se base, no en verdades absolutas y rechazos ciegos, sino en razonamientos y valoraciones de las fuentes de esas expresiones y las estimaciones de sus consecuencias, además de una legitimidad basada en la justicia social y no en las leyes de mercado.

Tunja, 28 de marzo de 2012


Los y las estudiantes de la UPTC, afligidos y afligidas por los sucesos, de los cuales hasta el día de hoy no se conocen los verdaderos hechos, que han dejado como resultado la muerte de un compañero estudiante de la escuela de ciencias sociales, y seis estudiantes más heridos, nos pronunciamos ante la sociedad colombiana; y consideramos que, en primer lugar, es necesario expresar toda nuestra solidaridad con las familias de los compañeros  heridos y en especial a la familia de Edwin Ricardo Molina. Sentimos como propio el dolor que ha golpeado a nuestra hermana Universidad Pedagógica Nacional en los hechos de los cuáles tampoco hay claridad; además reflejamos que en estos momentos tan difíciles es más que necesario respaldar y solidarizarnos con todos y cada uno de nuestros compañeros que al mismo tiempo, de estar sufriendo la agonía de sus heridas y sus amputaciones, han sido blanco del acoso, del pre-juzgamiento y de la condena sin pruebas por parte de los medios de comunicación y las fuerzas del estado.

Denunciamos la manera irresponsable en la que los periódicos regionales y medios de comunicación nacional, han reflejado de una forma sensacionalista y manipuladora los acontecimientos que sucedieron al interior de nuestra alma mater. De igual manera denunciamos los actos de fuerza desmedidos de las autoridades policiales, quienes agredieron a los estudiantes con un peligroso gas que causo intoxicación gastrointestinal a muchos estudiantes el día martes.
Nos oponemos a la doble moral que ha estigmatizado al estudiantado celebrando la muerte y no la vida de los seres humanos. No podemos atrevernos a ponderar la vida como lo han venido haciendo el gobierno nacional y los medios de comunicación. Hoy tanto la universidad como el país deben sentarse a dialogar sobre las circunstancias que han generado los conflictos sociales internos en una guerra que lleva más de 80 años y una historia entera marcada por el conflicto.

Con este documento no pretendemos esbozar una verdad, sino incitar al debate académico que nos permita enriquecer la movilización de los y las estudiantes por la defensa del derecho a la educación publica, popular, emancipadora, digna y estatal.

Finalmente invitamos a los compañeros de las diferentes universidades y  la sociedad, en general,  al país a que se solidaricen con la comunidad universitaria. Comprendiendo que el mayor acto de solidaridad es contribuir con los escenarios de debate para construir la ley alternativa de los estudiantes, y participar, en ese mismo sentido en los escenarios de articulación estudiantil, unidos en torno a la Mesa Amplia Nacional estudiantil y entorno de la Mesa Local estudiantil.

ESTUDIANTES UPTC